Protege muebles y persianas de madera en otoño en 6 pasos
El otoño trae consigo un cambio significativo en las condiciones climáticas: lluvias, vientos más fríos y una menor exposición solar. Esto no sólo afecta el ambiente y nuestras rutinas diarias, sino también el estado de nuestros espacios exteriores. Para un momento y protege muebles y persianas para que duren mucho más.
Si tienes muebles de exterior, puertas o persianas de madera, es importante tomar medidas preventivas para protegerlos de los efectos adversos del clima otoñal y prepararlos para el invierno que se avecina. La humedad, los cambios de temperatura y la exposición a las inclemencias del tiempo pueden deteriorar rápidamente la madera y otros materiales si no se les da el cuidado adecuado.
En Pinturas Juliá te ofrecemos una guía completa para mantener en buen estado los muebles de exterior y las puertas y persianas de madera en otoño, asegurando que duren muchos años en las mejores condiciones.
1. Inspección general: el primer paso para la protección
Antes de comenzar cualquier trabajo de protección, es esencial realizar una inspección general de los muebles de exterior y las puertas y persianas de madera. Durante esta revisión, debes buscar señales de desgaste, grietas, cambios en el color o zonas donde la madera esté especialmente desgastada. El objetivo es identificar áreas problemáticas que puedan requerir una atención especial.
En el caso de las persianas de madera, presta atención a los bordes, que suelen estar más expuestos al agua y la humedad. Si hay alguna parte hinchada o descolorida, eso indica que la humedad ha penetrado en la madera, lo que podría causar daños más graves a largo plazo.
Protege muebles de exterior, como mesas, sillas y bancos, examinándolos minuciosamente en las juntas y superficies planas. A menudo, las esquinas o las zonas donde la madera se une con otros materiales, como el metal, tienden a acumular más humedad y pueden comenzar a deteriorarse primero.
2. Limpieza profunda: un paso crucial antes de cualquier tratamiento
Una vez que hayas inspeccionado tus muebles y puertas, el siguiente paso es una limpieza profunda. La acumulación de polvo, suciedad, restos de hojas y humedad puede ser el caldo de cultivo perfecto para moho, hongos y otros organismos que deterioran la madera con el tiempo.
Protege muebles de exterior de madera, usando una mezcla de agua tibia y jabón neutro, frotando suavemente con un cepillo de cerdas suaves o una esponja. Si hay manchas difíciles o signos de moho, puedes optar por productos específicos para limpiar madera o una solución de vinagre y agua. Después de limpiarlos, asegúrate de enjuagar bien y dejar que la madera se seque completamente antes de aplicar cualquier tratamiento de protección.
En cuanto a las puertas y persianas de madera, el procedimiento es similar. Si están muy expuestas al polvo o al salitre, como ocurre en las zonas costeras, puedes usar un producto especial para limpieza de maderas exteriores. Además, asegúrate de limpiar las ranuras y bisagras, ya que la acumulación de suciedad en estos puntos puede hacer que las piezas mecánicas se desgasten y dificulten su correcto funcionamiento.
3. Lijado y reparación de imperfecciones
Una vez que los muebles, puertas o persianas estén limpios y secos, es importante reparar cualquier daño que se haya detectado durante la inspección. Si hay zonas donde la madera esté astillada, agrietada o desigual, el lijado puede ayudar a eliminar esas imperfecciones y preparar la superficie para un nuevo acabado o tratamiento protector.
Para realizar el lijado, utiliza papel de lija de grano medio a fino, dependiendo del estado de la superficie. Lija siempre en la dirección de las vetas de la madera para evitar dañarla. Una vez que hayas terminado de lijar, elimina el polvo restante con un paño húmedo o una aspiradora.
Si las grietas o daños son más profundos, es posible que debas rellenarlas con masilla especial para madera. Existen diferentes colores y texturas de masilla que se pueden adaptar al tipo de madera que tienes, para que los resultados sean lo más naturales posible. Una vez que la masilla se haya secado, lija la zona suavemente para nivelar la superficie antes de aplicar cualquier tratamiento.
4. Aplicación de protectores: barnices, aceites y pinturas
La madera es un material natural que, si no está bien protegida, puede sufrir debido a la exposición al agua, al viento y al sol. Protege muebles y persianas de madera y mantenlos en buen estado, es crucial aplicar productos protectores que actúen como una barrera contra estos elementos.
Barnices y selladores
Uno de los productos más comunes que protege muebles y su madera es el barniz. Los barnices para exteriores están formulados para ser resistentes a la humedad, a los rayos UV y a los cambios de temperatura. Es recomendable aplicar al menos dos capas de barniz para asegurar una buena protección. Antes de aplicar el barniz, asegúrate de que la madera esté completamente seca y limpia.
Protege muebles de exterior con más intensidad, porque están muy expuestos a la intemperie, un barniz marino es una excelente opción. Este tipo de barniz está diseñado para resistir condiciones extremas de humedad y salinidad, lo que lo convierte en una opción ideal si vives cerca del mar o en una zona donde las lluvias son frecuentes.
En el caso de las puertas y persianas, es recomendable utilizar un barniz o sellador que ofrezca protección adicional contra los rayos UV, ya que las puertas suelen estar expuestas a la luz solar directa durante todo el año.
Aceites para madera
Los aceites para madera son una excelente opción si prefieres un acabado más natural y menos brillante que el barniz. Los aceites penetran en la madera y la nutren desde el interior, a la vez que crean una barrera protectora contra la humedad y los rayos UV.
El aceite de teca y el aceite de linaza son dos de los productos más populares. Úsalos y protege muebles de exterior y puertas de madera. Estos aceites deben aplicarse en varias capas finas, dejando que cada capa se absorba antes de aplicar la siguiente. Aunque los aceites pueden necesitar más reaplicaciones que los barnices, ofrecen una protección excelente y realzan la belleza natural de la madera.
5. Cubrir y almacenar: protección adicional contra el clima
A pesar de aplicar productos protectores, lo ideal es proteger los muebles de exterior y las persianas de madera del clima severo cubriéndolos o almacenándolos adecuadamente cuando no se utilizan.
Fundas y cobertores impermeables
El uso de fundas o cobertores impermeables es una solución práctica para los muebles de exterior. Estas fundas protegerán tus muebles de la lluvia, el viento y la acumulación de hojas o suciedad. Es importante asegurarse de que las fundas permitan la circulación de aire, ya que la humedad atrapada puede causar la aparición de moho o dañar la madera.
Almacenamiento en lugares cubiertos
Si es posible, guarda los muebles de exterior en un cobertizo o garaje durante los meses más fríos. Esto les brindará una protección adicional frente a las inclemencias del tiempo. Si no tienes espacio para almacenarlos, agruparlos en una zona protegida del jardín o del patio y cubrirlos con una lona también puede ser una buena opción.
Para las puertas y persianas de madera que no pueden almacenarse, asegúrate de que estén bien cerradas y ajustadas para evitar que el viento o la lluvia penetren en la madera a través de las juntas. Las cortinas exteriores o pantallas también pueden ser una opción para protegerlas de la lluvia directa.
6. Mantenimiento regular durante el otoño e invierno
El mantenimiento no debe limitarse a una única revisión al comienzo del otoño. Es importante realizar inspecciones regulares durante toda la temporada para detectar cualquier signo de deterioro o daño causado por el clima.
Por ejemplo, después de una tormenta fuerte o de varios días de lluvia, protege muebles de exterior y revisa las puertas para asegurarte de que no haya agua acumulada o humedad en exceso. Si detectas alguna zona problemática, límpiala y sécala inmediatamente para evitar que la madera se hinche o se deteriore.
Proteger los muebles de exterior y las puertas y persianas de madera durante el otoño es un proceso esencial para garantizar su durabilidad y buen estado a largo plazo. Una combinación de limpieza, reparación, aplicación de productos protectores y almacenamiento adecuado te permitirá disfrutar de tus espacios exteriores por mucho tiempo, incluso en las épocas más frías del año.
